Cómo saber si lo estás haciendo bien
en el arte de veranear (y algunos libros que recomiendo)
¿Por ahora dirías que está siendo un verano raro o normal? ¿Cómo crees que lo recordarás? Sea cual sea tu respuesta, el tiempo tiene la suya: ya estamos en el ecuador del verano. El mediodía de las familias unidas, como escribió Salter.
En todos esos pisos blancos de la costa, con toallas colgadas secándose al sol de justicia, un conflicto está sucediendo. Oh, cómo me encanta acordarme de eso justo después de sentirme embobada por la imagen y sus destellos.
Creo que el verano está hecho para que nuestra vida de invierno y su particular orden y exigencia nos parezca un poco absurda. En mi caso no es el acto de escribir lo que me provoca ahora rechazo, sino todo lo que lo rodea y lo sostiene. Conseguir dar dos pasos atrás de nuestra propia vida y que todo nos dé un poco de cringe es un objetivo noble para estos tiempos.
El verano está plagado de errores. Nos equivocamos de destino, invitamos más días de los que nos gustaría, no pillamos las indirectas del que quiere que nos vayamos de su casa, pasamos demasiado tiempo o demasiado poco con la familia de origen. No hay verano sin error, es el peaje de la estación.
Invierno y verano sirven para invalidar al otro: ninguno es tan permanente ni importante. Todas las grandes conclusiones que saque este verano las borrará el invierno y viceversa. Tomaré mil decisiones respaldadas por la fuerza de estos días que ni recordaré en unos meses.
Este año he descubierto que hay algo mágico en que nadie sepa dónde estoy. Es un tipo de nuevo lujo que no pude anticipar. No necesito saber de forma instantánea dónde se encuentran mis amigos, ya les veré en septiembre y me contarán dónde han pasado las vacaciones, si quieren. El misterio siempre será más poderoso que cualquier story con fondo de mar azul.
Hoy, como todavía no es el último día de la feria, sigo creyendo que un libro puede salvarnos del peor de los veranos. Pero dadas las fechas, hay que actuar con premura. Los libros que he seleccionado son aquellos que no se dejan abandonar, obras que terminan dominando nuestras rutinas y conversaciones y sueños, libros que nos obligan a lanzarle una pregunta nueva a la persona sobre la que creíamos que ya lo sabíamos todo. Libros que levantan hasta el verano más insalvable:
Si te interesa la amistad femenina y su complejidad, la maternidad, los efectos del cambio de clase social, el oficio de escribir, el amor romántico, esta saga abarca todos estos temas y lo hace a través de un suspense que te hará sacrificar horas de sueño: