Alguien tiene que haber escrito ya sobre el poder de lanzar una pregunta. No solo es valioso lo que se responde, también hay mucha verdad en lo que se omite, en la pausa entre pregunta y respuesta, en la dirección de los ojos cuando se estructura la respuesta.
Me encanta hacer preguntas. Es una forma elegante de desaparecer del foco permaneciendo en el plano.
Mi profesor de filosofía del colegio nos contó una vez que Freud le preguntó a un matrimonio longevo que tenía como pacientes: “¿Qué pasaría si uno de los dos muriese? El hombre se apresuró a responder: “Estaría muy triste.” Solo pensó en cómo le afectaría a él. No ha habido ni un año de mi vida que no me acuerde de esta respuesta.
Hoy comparto aquí mi propio cuestionario de Proust, que me parece un poco más fresco y más propio de la temporada escorpio que atravesamos. Además se está acercando la Navidad, llegan tiempos de cenas y sobremesas, el momento idóneo para reconocer a un narcisista, a un reptiliano, o a un corazón sencillo.
Todas vuestras. Si cuando las hagáis os sorprende alguna respuesta, escribídmela en los comentarios.
<3
Cuestionario Magical Thinking
¿Cuál es tu relación con el dinero?
¿Qué le dirías a tu primer amor?
¿Cómo distingues entre intuición y paranoia?
¿Cuándo fue la última vez que compraste flores?
¿Cómo se te da la amistad?